Los mitos del pelo blanco 

Posted by in Clínicas

A mi padre le empezó a salir pelo blanco con poco menos de 30 años. Todavía recuerdo algunas fotos en las que se le ve muy joven pero ya bastante canoso. Yo he heredado el pelo blanco de mi padre. Recuerdo ir caminando un día con un amigo que se paró y dijo: “Madre mía, tienes mogollón de canas”. Es lo que pasa cuando alguien no te ve durante un tiempo. Para mí fue un proceso natural, pero la gente que me veía de vez en cuando se sorprendía, como si me hubiera caído encima una losa de años.

Dicen que la edad no es número, es un estado mental, pero para mí no es así: tienes los años que tienes y se acabó. Y si cuando cumples 40 piensas en que realidad tienes 30, tarde o temprano te darás de bruces con la realidad. Así que cuando a mí me echan unos cuantos años más por el pelo blanco, me río para mí y digo: “bueno, por lo menos tengo pelo, no como otros”.

Porque eso sí, el pelo blanco me da igual, porque era algo genético, pero por lo menos que haya pelo. Por eso he corrido a ver un dermatologo alopecia en Vigo cuando empecé a notar que el pelo se me caía más de lo habitual. Porque hasta ese momento me había fiado de la sabiduría popular que afirma que los que tienen el pelo blanco no se quedan calvos antes de tiempo. Conocí dos o tres ejemplos de personas con el pelo canoso y bastante calvas siendo jóvenes, pero son detalles que trataba de ‘olvidar’ para no preocuparme.

Así que cuando el dermatólogo alopecia en Vigo me dijo que no había ninguna relación causa-efecto científica que certificase que el pelo blanco evitaba la alopecia, yo también me di de bruces con mi realidad. Pero, aún había esperanza para mí. Hoy en día no hay remedios milagrosos, pero sí fórmulas que ofrecen retrasar la caída excesiva del pelo. Y lo mejor siempre es confiar en profesionales y dejarse de los remedios de la abuela y la sabiduría popular, sobre todo si se trata de mantener a tu querida caballera más o menos intacta.