Si quieres vender un piso y lo tienes vacío es posible que en la inmobiliaria te recomienden que lo vistas para que quede mejor y sea más fácil ponerlo a la venta. Lo cierto es que el atractivo de un piso amueblado, bien decorado, es mucho mayor que el de un piso totalmente vacío. La inversión que supone el decorar el piso muchas veces se ve compensada porque, si se hace bien, no solo se va a vender rápido y al precio esperado, sino que el comprador puede mostrarse interesado en adquirir los muebles.

El truco para vestir un piso para venderlo es en no recargarlo. Una decoración muy minimalista le dejará ver al comprador las posibilidades del lugar y hará que todo parezca mucho más espacioso. Por ejemplo, las cortinas de lamas resultan más adecuadas para las grandes cristaleras que las de vuelo, ya que al ir pegadas al cristal no restan espacio al salón.

En el salón no es necesario colocar demasiadas cosas. Unos bonitos sofás, una lámpara moderna y un par de cuadros, junto a una tele colgada en la pared estratégicamente, puede ser suficiente. Una bonita alfombra o una mesa de centro darán el toque final al conjunto.

Los dormitorios son los espacios más fáciles de decorar, tan solo la lámpara, las mesillas y la cama. No es necesario colocar armarios, incluso si la casa no tiene armarios empotrados ya que con solo esto ya se verá la habitación vestida. Nuevamente, no hay que olvidar los cuadros y las cortinas, ya que son fundamentales en la imagen del dormitorio y le darán una gran calidez al mismo.

Usa los espejos para jugar con la luz e iluminar un poco más las zonas más oscuras de la casa o para dar sensación de amplitud en un pasillo o en una entrada estrecha. Y no olvides que también es muy importante el olor, así que coloca unos bonitos ambientadores que hagan que la sensación al entrar en la casa sea muy agradable y no huela a vacío.

Por último, trata de mostrar la casa durante el día, en las horas de sol, ya que la luz hará que se vea mucho más bonita. Antes de la visita airea la vivienda y asegúrate de que no hay polvo ni nada que pueda dar una mala impresión a los posibles compradores. ¡El éxito estará garantizado!