Cambia la imagen de las botas de tu niño en cuestión de segundos

Posted by in Cordones y cintas

Las botas infantiles tienen que tener tres cualidades básicas: deben de ser cómodas, deben de ser resistentes y tienen que tener imaginación. A los niños les gustan los colores y sus botas deben de responder a esta imagen. Pero a veces, para los padres, unas botas marrones o negras son más prácticas porque es fácil teñir una rozadura del mismo tono y porque con un poco de betún suelen verse impecables. En cambio, las botas con dibujos son mucho más malas de limpiar y de arreglar si se arañan.

Pues si recurres a las botas negras o marrones para el día a día, puedes cambiar su imagen aburrida en cuestión de segundos utilizando cordones de colores que les den ese toque diferente y divertido que busca el niño. Para ello tienes varias opciones distintas y todas ellas muy sencillas:

-Compra cordones multicolores. Hay cordones que se realizan ya en varios tonos diferentes para que sean muy alegres. Es la opción más fácil de todas. Los hay jaspeados e incluso también los puedes encontrar con la mitad de un color y la otra mitad de otro para que al ponerlos se cree el efecto de que has utilizado dos diferentes, cuando en realidad es uno solo.

-Compra tres cordones de tonos diferentes y trénzalos. Es importante que sean cordones muy finos para que una vez hecha la trenza quepan bien por los ojales. El resultado será muy bonito y puedes rematarlo con varios lazos. Si se hace demasiado ancho usa solo dos cordones enroscados entre sí o incluso unidos, de modo que los vayas retorciendo al colocarlos y se vayan mostrando ambos colores.

-Compra tiras de goma imitando a cordón en varios colores. Se trata de tiras de goma con dos trabillas que se introducen en los ojales y que quedan fijadas. Cada dos ojales enfrentados se coloca una tira imitando una pasada del cordón. Si se usan tiras en distintos colores el resultado es muy divertido y le encantará al niño.

Como ves, opciones no faltan y el color no tiene por qué ser monótono ni en tu calzado ni en el de tus hijos. Anímalos a realizar sus propias creaciones para que se sientan a gusto con lo que llevan y protagonistas en su propia vida. Una manera divertida de interactuar con tus hijos y que sientan que sus padres son “chachis”.