Llevaba un par de años bastante deprimida. Me resisto a llamarlo depresión porque nunca llegó a ser algo descontrolado y que precisase ayuda médica, pero me encontraba bastante baja de moral. Un desencuentro amoroso y algunos problemillas laborales me llevaron a aislarme una buena temporada. Aunque tengo muchas amigas, preferí tener un tiempo para mí.

Ahora que he superado el bache me he dado cuenta que acerté cuando decidí estar un tiempo “fuera de circulación” porque sirvió para aclararme las ideas y ponerme unos nuevos objetivos. El primero de ellos fue quererme más a mí misma. No me gustaba lo que veía cuando me miraba al espejo y esa era una de las razones de mi estado de ánimo.

Una amiga me recomendó una clínica de Liposuccion en Pontevedra. Al principio sentí lo que muchas personas cuando oyen hablar de la liposucción: ¿por qué debo acudir a la cirugía estética? ¿Merece la pena pasar por el quirófano por una cuestión de aspecto físico? Pero no es solo el aspecto físico: si una se siente a gusto consigo misma, la mente también “se ve” mejor. Y así fue como me sucedió a mí.

De todas formas, como a me aclararon desde el principio en la clínica es importante que cualquier persona interesada en hacer una liposucción sepa que esta intervención no adelgaza, estrictamente hablando, sino que moldea el cuerpo. Debemos mantener una vida saludable después de someternos a la liposucción para que esta intervención sea realmente exitosa.

En mi caso particular no pude quedar más satisfecha por el trato recibido en la clínica especializada en  Liposuccion en Pontevedra. Cuando tratas con profesionales te sientes a gusto y sabes que cualquier duda va a ser resuelta sin dobleces. Tenía un poco de miedo al principio, por el dolor del posoperatorio y por la secuelas que pudiesen quedar, pero desde la clínica me ofrecieron toda la ayuda que necesité.

No quiero decir con esto que someterse a una liposucción cambie la vida (para bien) de cualquier persona, pero en mi caso fue el inicio de un cambio radical que tuvo consecuencias positivas a casi todos los niveles.